Siete personas —seis oficiales de la División de Robos de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) de la Policía Nacional del Perú (PNP) y una civil— fueron detenidas durante la madrugada en un operativo conjunto liderado por el Ministerio Público y la Dirección Contra la Corrupción de la Policía (Dircocor). La intervención se ejecutó en la propia sede de la Dirincri, tras una orden de allanamiento emitida a solicitud del Segundo Despacho de la Primera Fiscalía Especializada en Corrupción de Funcionarios de Lima.

El operativo, que se extendió por aproximadamente siete horas, culminó con la detención de todos los implicados, quienes fueron trasladados enmarrocados hacia la sede de la Dircocor, donde permanecerán mientras avanzan las investigaciones. A su salida de las instalaciones policiales, el fiscal a cargo del caso, Agustín Chuquipul Vidal, detalló los primeros hallazgos que sustentan la medida.

Según la investigación preliminar, los agentes intervenidos habrían participado en un presunto acto de cohecho pasivo propio. La imputación se remonta a una intervención realizada en el distrito de San Miguel, tras la cual los policías habrían solicitado a uno de los detenidos el pago de S/30.000 a cambio de beneficios indebidos. De acuerdo con la tesis fiscal, el monto pactado habría sido abonado parcialmente: S/15.000 fueron transferidos a la cuenta bancaria de la civil detenida, quien presuntamente actuó como intermediaria.

“El efectivo policial ha soltado la suma de S/15.000 a través de una diligencia que realizaron el 21 de marzo. La jueza nos otorgó una medida de detención con allanamiento”, declaró el fiscal Chuquipul Vidal, subrayando que existen elementos suficientes para sustentar la intervención y mantener la medida restrictiva.

La detención de los seis agentes revive episodios recientes de presunta corrupción dentro de esta misma unidad policial. En noviembre, el entonces jefe de la División de Robos, el coronel PNP Juan Carlos Montúfar, fue acusado de liderar —junto con ocho agentes— el robo de medio millón de soles durante un operativo en una vivienda ubicada en Huacho. Ese caso continúa en investigación y dejó expuesta una crisis interna que hoy vuelve a ponerse sobre la mesa.

La situación se agrava en un contexto donde, según información difundida por la propia institución, al menos 570 policías han sido relacionados con actos de corrupción en lo que va del 2025. Estas cifras no solo encienden alertas institucionales, sino que también reflejan el desgaste de la confianza ciudadana en una de las principales entidades encargadas de garantizar la seguridad pública.

Fuentes fiscales indicaron que las diligencias continuarán en los próximos días, incluyendo ampliación de testimonios, revisión de movimientos bancarios y pericias a dispositivos electrónicos incautados. No se descarta que puedan surgir más implicados conforme avancen las indagaciones.

El caso suma un episodio más a la lista de investigaciones por corrupción dentro de la PNP, especialmente en unidades operativas clave como la División de Robos. La Fiscalía Especializada en Corrupción de Funcionarios ha reiterado que continuará priorizando casos que involucren abusos de autoridad o cobros indebidos por parte de efectivos policiales, especialmente en intervenciones donde la ciudadanía se encuentra en situación de vulnerabilidad frente al ejercicio del poder coercitivo del Estado.