El periodismo peruano vuelve a estar de luto. La Asociación Nacional de Periodistas del Perú (ANP) exigió una sanción para los responsables del asesinato del periodista Mitzar Bato Castillejos Tenazoa, quien falleció el 26 de diciembre tras dos semanas de agonía luego de ser víctima de un atentado armado en Aguaytía, provincia de Padre Abad, región Ucayali.
El ataque ocurrió el 12 de diciembre, cuando dos sicarios dispararon a quemarropa contra el comunicador mientras salía de su vivienda rumbo a conducir su programa informativo en Radio Latín Plus 107.7 FM. Tras recibir los primeros auxilios en un centro de salud local, Castillejos fue trasladado al hospital de Tingo María y luego al hospital María Auxiliadora, en Lima. Lamentablemente, su estado crítico terminó con su fallecimiento la mañana del 26 de diciembre.
Denuncias periodísticas que pudieron motivar el atentado
Según información recopilada por la ANP en la zona, el periodista había estado realizando denuncias públicas sobre presuntas irregularidades en la gestión municipal de Padre Abad, lo que refuerza la urgencia de investigar el crimen considerando su labor informativa como una de las posibles líneas móviles del ataque. El hecho pone nuevamente en evidencia el riesgo al que se enfrentan los periodistas regionales cuando cumplen su rol fiscalizador frente al poder local.
Un año nefasto para la libertad de prensa en el Perú
Este asesinato constituye el segundo crimen contra periodistas en diciembre y el cuarto registrado en lo que va del 2025, consolidando un año alarmante para el ejercicio de la libertad de expresión en el país. Las cuatro víctimas tenían en común trabajar desde regiones e investigar temas de gestión pública y autoridades locales o regionales, un patrón que preocupa a organismos defensores de derechos humanos y gremios de prensa.
La ANP alerta que este escenario muestra un serio deterioro de las condiciones de seguridad para quienes ejercen el periodismo, especialmente fuera de Lima, donde la presencia estatal y mecanismos de protección resultan insuficientes.
La ANP demandó que la Fiscalía de Derechos Humanos y la Policía Nacional del Perú actúen con rapidez y eficiencia para evitar que este asesinato quede impune. La organización subrayó que esclarecer los hechos es crucial no solo para hacer justicia con Castillejos, sino para evitar nuevos ataques y fortalecer la protección del ejercicio periodístico.
Asimismo, la asociación extendió su solidaridad a la familia del comunicador —en especial a su madre y hermana, quienes permanecieron a su lado durante 14 días de agonía—, y expresó su apoyo a la comunidad periodística de Padre Abad y Ucayali, animándolos a continuar la labor que Mitzar desempeñó hasta sus últimos días.
