En una sesión realizada la noche del miércoles, el Congreso de la República del Perú aprobó el pedido de la presidenta Dina Boluarte para viajar a Ecuador este sábado 24 de mayo. La mandataria representará al país en la ceremonia de toma de mando del nuevo presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, quien recientemente fue elegido como jefe de Estado.
Con 57 votos a favor, 34 en contra y una abstención, el pleno del Legislativo respaldó la solicitud que autoriza la salida temporal del país de la presidenta Boluarte. Su destino será la ciudad de Quito, donde se desarrollará esta actividad protocolar de alto nivel en el país vecino del norte.
Boluarte seguirá a cargo del despacho presidencial de forma virtual
Según lo establece el proyecto de ley aprobado, la jefa de Estado mantendrá el control del despacho presidencial de forma remota o virtual, conforme a lo establecido en la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo (Ley 29158). Esto permitirá que, pese a su salida del territorio nacional, continúe ejerciendo sus funciones constitucionales sin interrupciones.
El Gobierno peruano ha resaltado que esta visita tiene como objetivo fortalecer los lazos diplomáticos con Ecuador y, particularmente, con el nuevo gobierno de Noboa. La asistencia de Boluarte a la ceremonia es una señal de respaldo institucional y político por parte del Perú hacia su vecino fronterizo.
Se busca profundizar la cooperación fronteriza con Ecuador
Uno de los puntos clave del viaje será la firma de una hoja de ruta bilateral, impulsada a nivel de cancillerías, para abordar temas de interés común, especialmente en zonas limítrofes. Así lo detalló el canciller Elmer Schialer, quien sustentó ante el Congreso la relevancia de la visita presidencial.
Schialer explicó que la hoja de ruta permitirá trabajar en la recuperación de ambientes degradados, la protección ambiental y la conservación de la cuenca transfronteriza Puyango-Tumbes. Esta zona hidrográfica, compartida por ambos países, tiene un impacto directo en la salud pública, el medio ambiente y las actividades económicas de las poblaciones fronterizas.
“Ello permitirá aliviar el impacto que tiene la calidad del agua en la cuenca, en la salud de la población, en las actividades económicas y en el medio ambiente de la zona de frontera”, puntualizó Schialer durante su exposición ante el Pleno del Congreso.
Reacciones políticas: apoyos y críticas al viaje presidencial
Como es habitual en este tipo de decisiones, no faltaron los cuestionamientos. Algunos congresistas expresaron su preocupación por el momento político que vive el país y consideraron que la salida de la mandataria podría enviar un mensaje equivocado. Sin embargo, la mayoría parlamentaria consideró que se trata de una visita necesaria para continuar con el proceso de integración regional y fortalecimiento de relaciones bilaterales.
Cabe destacar que Perú y Ecuador han desarrollado en las últimas décadas una política de cooperación orientada al desarrollo sostenible en sus fronteras comunes, impulsando proyectos binacionales en materia de infraestructura, salud, seguridad y medio ambiente.
El viaje de Boluarte se enmarca en este contexto de integración regional y diplomacia activa, especialmente tras los cambios políticos recientes en Ecuador.