En su declaración ante la Policía Nacional del Perú (PNP), Siucho afirmó que el secuestro estaría relacionado con su participación en el caso “Los Waykis en la Sombra”.

Iván Siucho Neira, empresario dedicado al alquiler de maquinaria pesada, fue secuestrado el pasado viernes por un grupo de individuos, entre los cuales se identificó a dos policías de la Comisaría de Lince.

El secuestro fue notificado de inmediato por el hermano de la víctima, quien presenció el hecho sin ser detectado por los secuestradores. Según su relato, Siucho fue abordado en su departamento en Surco y obligado a subir a un vehículo, donde fue amenazado con un arma de fuego y llevado hacia el Cono Norte de Lima, antes de ser liberado nuevamente en Surco.

La declaración de la víctima revela que días antes del secuestro había recibido llamadas de una persona interesada en alquilar maquinaria pesada, quien se identificó como «Sebastián». Posteriormente, acordaron una reunión en su domicilio, pero otra persona, identificada como «Enrique», llegó en su lugar. Fue durante esta reunión que un grupo de individuos ingresó al departamento, lo amenazó y secuestró.

Durante las diligencias posteriores, Siucho logró identificar a uno de los policías involucrados en su secuestro, Edgar Tinoco Yantas, quien presuntamente lo subió al vehículo. La investigación policial avanzó rápidamente, resultando en la captura de tres de los siete involucrados, quienes pertenecen a la Comisaría de Lince.

El oficial a cargo del caso informó que dos de los policías involucrados habían abandonado sus funciones en la Comisaría de Lince el día del secuestro. Además, el comandante general de la PNP, Víctor Zanabria, indicó que el secuestro podría estar vinculado a actividades auríferas, aunque se descartó cualquier conexión con el caso «Los Waykis en la Sombra», en el que Siucho participa como testigo protegido.

Iván Siucho, en su declaración, negó rotundamente estar involucrado en la venta ilegal de oro, como se insinuó en medios de comunicación, y subrayó que tales afirmaciones dañan su honor. El caso ya se encuentra en manos de la fiscalía, y los implicados están detenidos en la División de Secuestros y Extorsiones de la PNP para continuar con las investigaciones.