En una operación simultánea ejecutada en la madrugada de este martes 3 de junio, la Policía Nacional del Perú (PNP) logró un nuevo golpe contra el crimen organizado. Esta vez, la intervención se centró en desarticular a la organización criminal ‘Los Injertos del Cono Norte’, sindicada por delitos de extorsión y sicariato.
Uno de los hechos más destacados fue la captura de Martina Hernández de la Cruz, madre de Erick Moreno Hernández, alias “El Monstruo”, quien es señalado como cabecilla de esta peligrosa red delictiva. La intervención se realizó en su vivienda ubicada en Ica, donde se hallaron explosivos y una considerable suma de dinero en efectivo, que se presume serían utilizados para actividades extorsivas.
Operativos simultáneos en Lima, Callao e Ica
El general Marco Antonio Conde, jefe de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri), detalló que el operativo se llevó a cabo en más de 40 inmuebles y un penal, en diferentes puntos de Lima, Callao e Ica. Gracias a una acción coordinada con el Ministerio Público, se logró la captura de 27 personas presuntamente vinculadas a la red criminal.
Uno de los arrestos clave ocurrió en el distrito de Ventanilla, donde fue detenido Kevin Walter Góngora Ayala, acusado de ser uno de los principales extorsionadores de colectiveros y transportistas en la zona. Góngora fue intervenido junto a familiares dentro de su domicilio, luego de que los agentes policiales ingresaran con el uso de la fuerza legal autorizada.
¿Quiénes son ‘Los Injertos del Cono Norte’?
Según las investigaciones policiales y fiscales, esta organización criminal operaba mediante llamadas, audios y videos amenazantes, con los que exigían pagos a empresarios, comerciantes y transportistas a cambio de no atentar contra sus vidas o las de sus familiares. Las víctimas, bajo constante presión, eran obligadas a entregar montos económicos que se camuflaban como “cuotas de seguridad”.
La organización estaría encabezada por “El Monstruo”, actualmente prófugo y presuntamente refugiado en Brasil. Las autoridades peruanas ya han activado los mecanismos internacionales para lograr su ubicación y captura.
Los detenidos, incluida la madre del cabecilla, se encuentran bajo detención preliminar por 15 días, mientras se desarrollan las diligencias e interrogatorios correspondientes. Todos ellos enfrentan cargos por organización criminal, extorsión y sicariato.
El general Conde indicó que este es solo el primer paso en el proceso de desmantelamiento total de la red. “Tenemos más órdenes de detención y allanamiento en proceso. Este tipo de estructuras no se derrumban con una sola intervención, pero estamos avanzando”, afirmó el jefe policial.
Impacto y próximas acciones
La acción de la Policía y el Ministerio Público representa un avance significativo en la lucha contra la criminalidad organizada, especialmente en sectores donde el sicariato y la extorsión se han vuelto una amenaza constante. El operativo también evidencia la creciente participación de familiares directos de los cabecillas en las operaciones logísticas y financieras de las mafias locales.
Se espera que en las próximas horas se anuncien nuevas capturas, y no se descarta la intervención en más penales donde podrían estar operando miembros activos de esta red desde dentro de centros penitenciarios.