Estaban recluidos en el Departamento de Investigación Criminal PNP en San Juan de Lurigancho.
Los efectivos policiales Luis Miguel Lago Olivares y Jarlin Dávila Risco fueron acusados de cobrarles una coima de cien soles a un joven por, presuntamente, conducir ebrio y por acoso sexual contra su pareja en Jicamarca, Huarochirí.
Ambos policías fueron detenidos en la comisaría de San Antonio de Jicamarca pero fugaron a las pocas horas mientras estaban custodiados por los efectivos Moisés Paredes Añape y Jonathan Cuadros Guzmán por disposición del Departamento de Investigación Criminal de la Policía Nacional del Perú.
La denuncia señala que los efectivos Lago Olivares y Dávila Risco le pidieron cien soles al joven para no conducirlo a la dependencia policial. El pago se habría realizado mediante un aplicativo. Luego de ello, uno de los agentes forzó a la pareja del denunciante para besarla, le pidió hacer sexo oral, y la conminó para que le otorgue su número telefónico.
Tras los hechos, se acercaron a la comisaría para presentar la denuncia. La acción policial detuvo a Dávila y Lugo quienes fugaron con el apoyo de sus compañeros Paredes Añape y Cuadros Guzmán.
