2024: uno de los peores años para el fútbol peruano.
El mismo día que la justicia peruana determinaba la libertad provisional de Agustín Lozano, presidente de la Federación Peruana de Fútbol y mientras que el entrenador uruguayo Jorge Fosatti enfatizaba que ‘nunca prometió nada’, la selección peruana cayó al último lugar de la tabla en el mismo estadio argentino donde, hace 55 años, conquistó su primera clasificación a un mundial.
La Bombonera fue testigo de una decepcionante actuación de la Blanquirroja que solo ratifica el nivel y jerarquía de una escuadra nacional que no sabe meter goles y que tuvo que rendirse ante un Lautaro Martínez quien, con un golazo, nos dijo ‘hasta aquí nomás’.
Así, el 2024 nos despide como la peor selección sudamericana con siete puntos de posibles 36, la que más goles recibió, la que menos anotaciones logró, y la única que ganó solo un partido. Más de 50 jugadores convocados por Reynoso y Fossati y un equipo cansado y sin rumbo que cuida sus contratos, las piernas y la edad.