La conversación, grabada entre Carlos Guillén y Noemí Alvarado el 18 de diciembre, insinúa que el Gobierno habría tenido interés en silenciar a Burga debido al escándalo de Qali Warma.
El material, ahora en manos de la Fiscalía, contradice el comunicado presidencial que negó vínculos entre Guillén y los Boluarte. La Fiscalía Anticorrupción y la Fiscalía Penal investigan si el Ejecutivo estuvo involucrado en un intento de soborno para obtener más información sobre el caso.
El audio dura aproximada de 25 minutos, se encuentra ahora en la Fiscalía Anticorrupción y en la Fiscalía Penal del distrito a fin de esclarecer aún más la muerte de Nilo Burga. La hipótesis resolverá si el testigo del caso Frigoinca-Qali Warma contó con la aprobación del Ejecutivo, con el propósito de sobornar a cambio de más información sobre esto.
El Ministerio Público se encuentra evaluando la gravedad de la situación, mientras la controversia sobre el caso crece en medio de la presión por esclarecer la muerte de Burga y los posibles lazos con el Gobierno.