El Congreso de la República busca desviar las investigaciones en torno al asesinato de Andrea Vidal, alegando que el verdadero objetivo del atentado habría sido el conductor del taxi en el que se trasladaba.
Esta versión, promovida por congresistas que niegan la existencia de una presunta red de prostitución que opera en el Parlamento, ha generado polémica. Según esta nueva narrativa, basada en un supuesto análisis balístico de la Policía Nacional del Perú (PNP) sin sello oficial, los criminales habrían dirigido su ataque contra José Daniel Vargas Briceño, conductor del taxi, quien recibió 16 disparos. Andrea Vidal, quien también fue atacada y falleció tras recibir 7 impactos de bala, sería considerada una «víctima colateral» del sicariato.
No obstante, fuentes de la Fiscalía señalaron que el documento en mención carece de validez legal, ya que no cuenta con los logos ni las firmas del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Además, recalcaron que esta hipótesis carece de respaldo probatorio y podría estar destinada a desviar la atención de las investigaciones sobre la red de prostitución vinculada al caso.
En un comunicado, el Congreso expresó: «Nos solidarizamos con la familia de la señorita Andrea Vidal. Tal como ha determinado el análisis balístico de la Policía Nacional del Perú, ha sido una víctima más del sicariato que golpea duramente a nuestra sociedad. En este caso, los criminales tenían como objetivo al conductor del taxi».
Esta versión es apoyada por congresistas como el fujimorista Fernando Rospigliosi, quien mediante redes sociales aseguró que «no existen pruebas que respalden la existencia de la red de prostitución en el Parlamento». Asimismo, criticó el desempeño de la Comisión de Fiscalización, presidida por Juan Burgos, a quien calificó de «ineficaz».