Desde las procesiones tradicionales de Ayacucho hasta los paisajes naturales de Oxapampa, Perú ofrece diversas opciones para disfrutar del feriado largo de Semana Santa.

La Semana Santa es una de las festividades más importantes para el turismo en Perú, con miles de peruanos buscando destinos cercanos para disfrutar de un merecido descanso. Según la Cámara Nacional de Turismo, en 2024 se realizaron alrededor de 1.5 millones de viajes durante el feriado, con un impacto económico que alcanzó los $204 millones. Para 2025, se espera un aumento tanto en el número de viajeros como en los ingresos generados.

Entre los destinos recomendados se encuentra el Norte Chico, que incluye lugares como Barranca y Huacho, ideales para quienes buscan escapar sin ir demasiado lejos. Las tranquilas playas, la variada gastronomía y los sitios arqueológicos, como la Ciudad Sagrada de Caral, hacen de este destino una opción corta pero llena de contenido.

Oxapampa, ubicada a unas 8 a 10 horas en bus desde Lima, ofrece un respiro entre montañas, ríos y una arquitectura con herencia austroalemana. Es perfecta para quienes buscan un ambiente tranquilo para pasar el feriado, con actividades como caminatas, paseos en bicicleta y la degustación de productos locales como cervezas artesanales y quesos.

Huaraz, a unas 7 horas en bus, brinda una experiencia única en la sierra de Áncash, combinando naturaleza imponente y cultura andina. Durante Semana Santa, además de las celebraciones religiosas, se puede visitar la famosa Laguna 69 o recorrer el Parque Nacional Huascarán. Para quienes buscan relajarse, los baños termales de Monterrey son una excelente opción.

Finalmente, Ayacucho es el destino más representativo para vivir la Semana Santa en su máxima expresión. Durante más de diez días, la ciudad se llena de procesiones, misas, música y arte religioso, atrayendo a miles de visitantes. La celebración incluye recorridos diarios por las iglesias coloniales y la degustación de platos típicos como la puca picante o el mondongo.